El Pais. Daniel Huebner, uno de los fundadores de Second life, ha dejado Linden Labs para embarcarse en una nueva aventura, 'VSide', un universo virtual en la línea de SL, pero basado en la música. “Después de cinco años tenía ganas de cambiar. ROBERTA BOSCO – Barcelona
Vside tiene un enfoque más artístico, la estética es diferente y las relaciones se basan en los intereses musicales. Se puede tocar y componer de forma colectiva, pinchar discos para los amigos, organizar conciertos, formar grupos, crear instrumentos… El espacio virtual formará parte de la vida de las personas cada vez más, pero no hay motivo de temer: nunca sustituirá el físico”, explica en Barcelona, donde ha acudido al festival Art Futura.
La experiencia de Second life empezó en San Francisco, en 2003. “Un grupo de amigos alquilamos un garaje en la calle Linden y decidimos adoptar este nombre en lugar de nuestros apellidos. Fundamos Linden Lab, y así nació Second life”. “El reto era crear una sociedad donde gente muy diferente pudiera vivir una vida paralela sin ningún tipo de limitación más allá de las reglas de amabilidad y convivencia. Lo que más queremos es conocer gente y que nos conozcan, encontrar amigos y naturalmente el amor, y Google no sirve para encontrar la persona justa. Internet es una herramienta solitaria. Puedes ponerte enfrente de tu pantalla y escuchar música, leer o ver un vídeo, pero en SL puedes hacerlo con otra gente, compartir la experiencia, comentarla”, subraya Huebner, 33 años, periodista de profesión.
Para Huebner, en SL no hay otros peligros que los que hay en la vida real. “Se han cometido algunos delitos. Los problemas de pedofilia son minoritarios, pero resultan atractivos a nivel mediático”. A Huebner le sorprende que los vecinos de SL reproduzcan sus conductas reales. “Se ha dicho que SL es una gran operación de mercadotecnia, pero la gente tiende a reproducir los esquemas del mundo real. Para socializar no hacen falta vestidos, para vivir en SL no necesitas una casa, y el avatar no debe tener una apariencia humana. Sin embargo, eso es lo que quiere la gente. Y otros se han puesto a vender ropa, diseñar casas y ofrecer los servicios requeridos por la comunidad”. Con todo, duda de las informaciones sobre vecinos de SL que han amasado fortunas.