Artículos de la categoría

produccionpropia

Noticias Agosto 21, 2005

Identidad y compromiso incondicional

Durante mi trabajo he entendido que la identidad es mucho más que lo que las personas creen de mi. Es cierto que en una parte mi identidad de las personas y las comunidades es una conversación que, como tal, no es fija, pero tampoco cambia a nuestro antojo. Aprendí que la identidad no sólo es una conversación acerca de mi mismo en cada momento. Hay algo más estable que se construye desde mi, en mi compromiso en la vida, con todas las consecuencias de dificultades, conflictos y uno que otro tropiezo doloroso.

Identidad de Reality o aparecer en la foto

Hay una forma de entender la identidad, que es común en este tiempo televisivo, que consiste en las percepciones y opiniones que tienes los otros sobre mi, o sobre nuestra comunidad, esa percepción se crea a partir de eventos y anécdotas diversas en el transcurso del tiempo. Hay mucho esfuerzo en la actualidad para construir, posicionar y fortalecer la identidad de las compañías y de individuos, en especial, en política. Sin embargo, hay una debilidad que trae la época de la imagen si no complementamos con otro aspecto de la identidad, tan importante como las percepciones de los otros, pero mucho menos centrado en nosotros como objeto de análisis, cuidado, refuerzo, cariño, vanidad, pretensión y todos los sustantivos relativos a exceso de valoración de la propia personalidad.

Los pocos espacios burocratizados que van quedando en el mundo de las grandes empresas, la administración del gobierno o instituciones académicas, mantienen una ilusoria apariencia de seguridad y estabilidad en que el juego consiste en pasar el tiempo sin propósitos, metas ni mediciones que hagan una diferencia que desafíe el espíritu. Dicho clima unido a las creencias del anti-estrés y el cuidado sagrado de sí mismo, permiten comunidades y personas que exploran hasta el infinito sus propias motivaciones y gustos, plantean reglas de convivencia en que nadie interfiera con nadie, y un lugar en que es imposible el mínimo compromiso responsable con propósitos humanos, proyecciones en la comunidad, persistencia ante dificultades ni compromisos sentimentales con mínima estabilidad.

En nuestra época de revoluciones y contra-revoluciones, ha quedado mucha gente que aprendió a no hacerse problemas en la vida o aparentar compromiso pero sin consecuencias que lo pongan en serio riesgo. Pero mucha de esa gente no consigue superar el desasosiego de algo que falta, de algo que no se encuentra, por muchos cursos, conferencias, terapias, empleos, viajes, parejas o experiencias extremas de todo tipo que se busque. Sin embargo, algo sigue faltando.

La identidad como compromiso pleno

La otra dimensión de la identidad consiste en cultivar un compromiso incondicional con un propósito humano. Este entendimiento de la identidad es importante porque lograr vivir satisfactoriamente depende principalmente de aprender a cultivar este sentido de compromiso incondicional con algún interés humano, para el cual consagramos la vida. Es lo que se llama construir un sentido para la vida, un sentido que desafía las capacidades, la tranquilidad y la seguridad de la vida rutinaria e indiferente. Un sentido que hace diferente a cada día, que hace escaso el tiempo de nuestra vida, que pone un horizonte y que muestra si avanzamos en alguna dirección en el transcurso de nuestra existencia.

Resueno fácilmente con ese entendimiento de la identidad que consiste en esa otra dimensión que, junto a las percepciones que creamos ante los otros, se construye a partir de compromisos vitales, incondicionales, desafiantes, problemáticos, conflictivos, estresantes, que muchas veces producen tropiezos dolorosos, que presionan por aprender nuevos modos, pero que se validan especialmente en la capacidad de hacer, de avanzar, de comprometer públicamente propósitos, promesas, y jugarse por cumplirlas, antes que por explicar las razones y los culpables “otros” de no hacerlo.

Una vida de compromiso incondicional es plena, porque llena la vida, vitaliza el alma, moviliza el corazón, orienta el tiempo, las relaciones, discrimina entre tanta oportunidad abierta en este mundo tan abierto. Demanda aprendizaje, esfuerzo, comparaciones, excelencia. No deja espacio al aburrimiento ni al estrés. Una vida de compromiso incondicional limita el tiempo del análisis y pone énfasis en el siguiente plazo, en la persistencia, en las obligaciones.

Más que la química moderna, las terapias eternas o las experiencias extremas, una parte importante de la felicidad de seguro que es posible encontrarla en una vida consagrada de verdad en algún compromiso con producir valor para otros seres humanos. Aunque en ello se vaya una parte de nuestra vida, aunque en ello a veces sufra nuestro consentido e hipertrofiado ego posmoderno.

Esta reflexión debe casi todo a lo aprendido con Fernando Flores. Obviamente, soy responsable único de estas palabras, pero agradezco sinceramente sus enseñanzas.

Te propongo comentar esta reflexión, para lo que te sugiero las siguientes preguntas: ¿Qué reacción emocional te merece este artículo? ¿Qué compromiso has tomado con la vida? ¿Qué compromiso es posible tomar o profundizar? ¿Qué consecuencias podría tener para ti tomar compromisos de este modo?

Ver Chile, ansiedad y vino tinto

Noticias Agosto 6, 2005

Emprende Educación

Innovar en Educación
En mi trabajo en el ámbito de la capacidad emprendedora, además de trabajar en el desarrollo de emprendedores emergentes en los negocios, también he trabajado en el desarrollo de habilidades de emprendimiento e innovación educativa con profesores.
Basados en esta experiencia, definimos parte de la orientación de nuestro trabajo como emprende.cl hacia la innovación educativa, a partir de una reinterpretación práctica de los propósitos y espacios que mueven a la educación formal.
En Chile, se trata de sumar a los avances en equipamiento y perfeccionamiento de contenidos desarrollados por el Ministerio de Educación, un cambio en la mentalidad de los profesores, que los lleve a enfocar su trabajo educativo desde la educación como entrega de “conocimientos” (contenidos), hacia el desarrollo de habilidades prácticas y sensibilidades en sus alumnos, fortaleciendo sus competencias emocionales, abriéndolos a mundos diversos e incorporando las tecnologías como medio educativo. Diseñando su trabajo con promesas de resultados prácticos, indicadores, mediciones y compromiso con cumplirlos.
Una evidente anomalía consiste en que los estudiantes invierten doce y catorce años de su vida para educarse, y al final de ese período, en su mayoría, no tienen asegurado un futuro académico ni laboral. Situación que, extendida cinco o siete años más en la educación universitaria, no mejora en la adaptación al mundo del trabajo.
Experiencias
Nuestra experiencia consiste en el desarrollo de proyectos con profesores, basados en la teoría de Fernando Flores, como lo contenido en los textos Educación y transformación, escrito con Francisco J. Varela G. (1994) y el trabajo más reciente El espíritu emprendedor y la vida wired: el trabajo en el ocaso de las carreras, escrito John Gray (2000).
Tenemos experiencia práctica acumulada de innovación educativa desde hace más de diez años, con profesores de México, España y de Santiago, Arica e Iquique en Chile.
Por ejemplo, el Colegio Alberto Blest Gana, fundado y dirigido por mis padres en Santiago, ha incorporado esta disciplina en su trabajo desde hace diez años, con excelentes resultados, logrando premios de excelencia, el proyecto de innovación Monte Grande, ahora el paso a jornada escolar completa y resultados académicos y sociales claramente superiores a colegios de condición similar.
En los últimos dos años, hemos desarrollado entrenamientos de emprendimiento para profesores de varios colegios de Arica, quienes han incorporado las prácticas de entrenamiento en la ontología del lenguaje y los estados de ánimo, y también han incorporado las herramientas de internet, como los blogs, con excelentes resultados.
Un ejemplo notable, en el último año, es el Colegio Domingo Santa María, en Arica, donde hubo mejoras de resultados y aprobación de los alumnos con deficiencias en matemáticas. Ahora han incorporado las tecnologías informáticas y la internet para mejorar la motivación y el aprendizaje de los estudiantes. Han creado una comunidad de profesores blogistas, que utilizan los blogs como herramienta educativa y los estudiantes hacen sus trabajos y exámenes en sus propios blogs.
Otros Artículos Educación:: 1 2 34

Noticias Agosto 6, 2005

Humanizar el Futuro

Muchas veces predomina una visión demasiado optimista de la globalización económica y la revolución tecnológica como fuentes de bienestar humano. La evolución de estos procesos en el mundo tiene una cara positiva de celebración de la inteligencia y capacidad de invención humanas, de oportunidad para mejorar la vida de los seres humanos y producir riqueza en los países. Pero también tiene un rostro amenazante en las consecuencias medioambientales y de salud, en la concentración de riqueza en unos pocos países y en grupos reducidos al interior de los mismos, y en un malestar espiritual para quienes no cuentan con un sentido que acompañe el cambio.
Podemos inhibirnos de reflexionar por no tener soluciones, por suponer que principalmente se trata de hacer ofertas en el mercado o por la convicción que en un plazo futuro el mismo proceso económico y tecnológico traerá las soluciones. A riesgo de sucumbir ante un colapso ambiental o social, es imprescindible y urgente reflexionar y revelar el costo humano de estos procesos. Se trata de buscar las anomalías que lo permiten, que no sólo se trata de hacer ofertas competitivas, porque hay diferencias de poder y posibilidades que afectan a la mayoría de la humanidad, que no todo es mercado de ofertas, también hay un espacio de construcción colectiva del mundo y conflictos de intereses y que, aunque fuera creíble que el avance técnico nos dará las respuestas, en lo inmediato habría que aceptar el sometimiento de demasiada gente a penurias inhumanas.
Dos esperanzas aparecen en el horizonte: crece el sentido que enfrentamos un asunto político que no sólo técnico, que es necesario debatir, empujar, movilizar en torno de una conciencia ambiental, social y cultural en el mundo, con el propósito de humanizar la globalización y la revolución tecnológica. También crece el sentido que la anomalía principal es la concepción de realidad, mundo y seres humanos que ha sustentado la ciencia durante cuatro siglos, el cual se impuso en todos los procesos humanos, pero que ahora comienza a mostrar su agotamiento con evidencia.
La aprensión
El modo en que ha avanzado la economía y la tecnología en el mundo, ha producido más costos que beneficios para millones de personas y peligrosamente duraderos para el ambiente. Hasta ahora, parece que vamos perdiendo: la riqueza del mundo ha crecido 3 veces en los últimos 30 años, pero sólo se ha beneficiado un tercio de la humanidad; el 20 % más rico de la población acumula el 80 % de la riqueza y el 20 % más pobre el 1 %; mil millones de personas que viven el en mundo más desarrollado tienen rentas de 25 mil dólares al año y esperanza de vida de 80 años, 3 mil millones tienen esperanza de una vida digna pero incierta y 2 mil millones de personas tienen una esperanza de vida menor que 50 años, entre los cuales existen 1400 millones que viven con menos de un dólar al día, 800 millones pasan hambre y diariamente 20 mil personas mueren de hambre; China es un ejemplo de crecimiento prolongado, pero son unos pocos millones de personas viviendo el auge tecnológico, muchos más viven como obreros del siglo XIX y la mayoría aún padecen la vida campesina de la edad media; Africa, en el extremo padece males apocalípticos de plagas, hambre y guerra. En el ámbito ambiental las consecuencias en la naturaleza, la salud y los derechos de las personas son simplemente aterradoras, como el cambio climático, la erosión de la bíodiversidad, la disminución y contaminación del agua, la acumulación de residuos tóxicos, la producción descontrolada de organismos modificados genéticamente y la disolución del trabajo. Persiste el descontrol en la emisión de contaminantes como CO2, CFC, metano, hidrocarburos, etc. Estados Unidos genera 275 millones de toneladas de residuos tóxicos al año, siendo el mayor exportador de deshechos del mundo. La India recibe residuos a pesar de prohibiciones internacionales. Crecen evidencias que todo el planeta está sometido a la contaminación y al riesgo de enfermedades asociadas.
De igual evidencia, mil millones de personas carecen de acceso al agua y más de 5 millones de personas mueren al año a causa de enfermedades prevenibles relacionadas con el agua, la mayoría son niños. En América Latina más del 70 % de la población no tiene acceso al agua potable. En biotecnología, las principales multinacionales de alimentos, química y agricultura se han unido para promover legislaciones internacionales para privatizar la genética natural del mundo, hoy poseen patentes excluyentes de material biológico del tercer mundo sin haber pagado derechos.
En las zonas de estructura de empleo modernas, las personas enfrentan el mercado flexible de empresas dinámicas con constantes reajustes de personal y movilidad absoluta. La experiencia es de innovación y proyectos a corto plazo, de riesgo y extrema flexibilidad. Las personas tienen la exigencia de reinventarse a sí mismas sobre la marcha, sin nexos de lealtad ni responsabilidad, más que la inmediata productividad. Los logros pasados no cuentan, los cambios de empleo implican pérdidas de nivel de ingreso, las personas mayores no son oferta. La falta de aprecio por el desempeño está socavando la ética de valoración en el trabajo, erosiona el compromiso y los lazos informales de confianza entre los trabajadores.
Este escenario laboral afecta profundamente a las personas, ataca las nociones de pertenencia, confianza en los otros, integridad y compromiso, que antes daban sentido a la vida. El trabajo ya no es una narrativa en la vida de las personas, que en una parte importante de sus vidas ya no saben quiénes son. Han quedado expuestas de tal forma, que esta flexibilidad absoluta resulta en depresión más que en sentimiento de oportunidad.
Esperanzas
Hay una esperanza en el cambio de la mente científica en la comprensión de la realidad, el cual están afectando otras áreas del conocimiento, incluyendo la cultura popular. En ciencia predominan nociones como complejidad, fluctuaciones, bifurcación, caos, probabilidad e incertidumbre. Para los científicos este nuevo paradigma “señala el fin de las certezas y la emergencia de futuros plurales”, que el mundo está en construcción y que existen múltiples futuros. El método científico como medio de entender y dominar la naturaleza, el antropocentrismo y la ilusión del progreso indefinido se ha agotado. A nivel popular crece la conciencia que todo en el planeta está relacionado, que las realidades humanas se afectan unas a otras, que lo humano afecta a lo no humano y viceversa, pero también que el futuro no está predefinido sino abierto a nuestra invención.
Esto abre otra esperanza que el futuro está abierto para inventarlo también en política. Aparece necesario considerar la democracia en las decisiones, porque no hay sabio suficiente. Aunque la presencia del paradigma en declinación permite aún hoy escepticismo, crece la conciencia que hemos vivido en un fuerte paradigma tecnológico, maximizador en nuestras relaciones económicas y sociales, que entiende como recursos a la naturaleza y las personas. Así como en la política se perdieron las certezas a partir de los fracasos, la catástrofe ambiental, económica y cultural debiera poner en duda el modelo. Necesitamos cambiar la concepción activa de ser humano, lo que se entiende por ser humano, cuando se explota, se vende, lucha por tener, miente, manipula, contamina, mata. Hay ahí una pésima visión de los seres humanos.
Felizmente, se avanza en revelar que no todo es técnico, que las interpretaciones técnicas y las decisiones políticas responden a intereses. La invención del futuro no sólo es cuestión de economía y tecnología, también es ética y política, de crear una conciencia más solidaria y empujar la creación de un modo de organizar el mundo más equitativo y menos destructivo. No es gratuito que Davos y Puerto Alegre no sean noticia en Chile; empresas como IKEA, Zara y GAP, negocios de 60 mil millones al año e iconos de la innovación y el fashion debieron mejorar las condiciones de sus empleados producto de la movilización social.
La desesperanza en influir en el futuro han hecho perder valor a pensar y comprometerse en inventarlo, esta falta de influencia en la construcción social ha desvalorizado las virtudes sociales. Para recuperar la voluntad y la responsabilidad, necesitamos fortalecer el pensamiento orientado al futuro. Una esperanza que podemos tener en Chile es que contamos con líderes mundiales ya embarcados en esta nueva invención en ciencia, educación, meditación y emprendimiento, son personajes como el biólogo Francisco Varela (desgraciadamente fallecido), el biólogo Humberto Maturana, el siquiatra Claudio Naranjo y el filósofo y senador Fernando Flores.
Desafío
El esfuerzo por que Chile se inserte en el mundo de la innovación tecnológica, no sólo depende de mejorar las universidades, promover políticas de inversión y cambios en los empresarios. Necesitamos recuperar la política frente a la totalización del mercado. La democratización del emprendimiento y la innovación requiere capacidad de movilización política para proteger y competir con iguales posibilidades. El peligro es que de tanto dar pruebas de modernidad y prudencia, estemos perdiendo la sensibilidad al dolor. Podemos tener esperanza en el cambio de conciencia pero hay que movilizarlo. Hoy más que nunca el futuro depende de nosotros.
Nuestro futuro nacional e internacionalmente, depende mucho de la capacidad política que logremos. No es cuestión únicamente técnica sino política, no es individual sino colectiva. Se requiere extender la globalización a la política, la cultura, los derechos humanos, económicos, y ambientales; responsabilizarse con los que quedan fuera, agregar a las mediciones económicas los costos humanos y ambientales, cambiar el alineamiento que existe entre felicidad, consumo, producción y deshechos.
Necesitamos recuperar la confianza en la lealtad, a veces se espera demasiado poco de las otras personas, porque se está dispuesto a demasiado poco. Chile tiene lo propio en desigualdad, contaminación e indiferencia. Así como en las guerras y catástrofes es pertinente pedir sacrificios, debiéramos comenzar por declarar la pobreza una catástrofe. Esto nos permitiría dar un paso en unidad y solidaridad nacional para avanzar luego hacia el desafíos de defender el patrimonio ambiental y cultural.
Lecturas recomendadas
1.- Teorías del desconcierto. Viaje al fondo de la incertidumbre: los pensadores que diseñan un futuro global. Santiago Ramentol. Ed. Urano, 2004.
2.- En el límite, la vida en el capitalismo global. Anthony Giddens y Will Hutton, eds. Tusquets, 2001.
3.- Claves para el Siglo XXI. Jérome Bindé ed. Ed. Crítica, UNESCO, 2000
4.- ¿Hij@ qué es la Globalización? Joaquín Estefanía. Ed. Aguilar, 2002
5.- El Malestar en la Globalización. Joseph E. Stiglitz. Ed. Taurus, 2002
6.- La Galaxia Internet. Manuel Castells. Ed. Areté, 2001
7.- La corrosión del carácter. Las consecuencias personales del trabajo en el nuevo capitalismo. Richard Sennett. Ed. Anagrama, 2000.
8.- Las conexiones ocultas. Implicaciones sociales, medioambientales, económicas y biológicas de una nueva visión del mundo. Fritjof Capra. Ed. Anagrama, 2003.
9.- China, una nueva historia. John King Fairbank. Ed. Andres Bello, 1996.
10.- En defensa de la política. Bernard Crick. Ed. Tusquets, 2001 (1962).

Volver inicio ricardoroman.cl

Noticias Agosto 6, 2005

Políticas de Capacidad Emprendora (1)

El siguiente es un documento que escribí hace algún tiempo acerca de las políticas de Capacidad Emprendedora, los límites del actual enfoque en que se basan los diseños de políticas y una propuesta basada en la disciplina de comunicación y emprendimiento de Fernando Flores y en mi propia experiencia práctica y reflexión.

La capacidad emprendedora se ha difundido durante los últimos años como un elemento importante en las interacciones entre las personas, inicialmente en los negocios (en especial con el auge de la industria informática), pero pronto se ha revelado importante también en el mundo social y cultural.

Los destacados resultados de algunos emprendedores notables en el mundo han hecho dirigir las miradas a su capacidad de inventar y llevar adelante iniciativas empresariales con diferencia en la comunidad. Se ha puesto de relevancia buscar el desarrollo de estas capacidades como una tarea de los gobiernos, los cuales han visto necesaria la iniciativa de las personas para producir desarrollo económico, más allá de las iniciativas públicas o la presencia de recursos naturales, en parte importante, al reconocer el explosivo desarrollo de las economías de mercado y la incapacidad de las economías más débiles para absorber los grupos de desempleados.

En el mundo social y cultural pronto se comenzó a reconocer como emprendedores a ciertos tipos de personas que manifiestan influencia sobre sus grupos o al manifestar cierta creatividad artística. Habría que investigar el momento y la razón por la cual se comenzó a llamar ???capacidad emprendedora??? a fenómenos que antes se llamaban liderazgo o simplemente creatividad.

En Chile, con el interés de fortalecer la democracia y ampliar las oportunidades de empleo, las políticas públicas de los últimos doce años han insistido con programas de promoción en estas dos áreas, sin embargo, con pobres resultados en especial en el mundo de la pequeña empresa y de las organizaciones juveniles.

Es evidente que, por lo menos, en los dos ámbitos en que las políticas públicas han buscado desarrollar capacidad emprendedora, como son, el mundo de los pequeños empresarios y en el mundo de las organizaciones sociales, los resultados no han sido del todo exitosos. No se ha logrado romper el ciclo breve de vida en que tanto empresas como organizaciones nacen, se desarrollan y mueren en un tiempo muy cercano al acompañamiento de los soportes públicos.

La Debilidad del Enfoque al diseñar Políticas de Capacidad Emprendedora

En nuestra opinión, estos débiles resultados tienen dos causas principales que inciden en que las organizaciones y las pequeñas empresas tengan breves ciclos de sobrevivencia. Por una parte está el enfoque, paradigma o interpretación en que se diseñan y ejecutan las políticas y programas de promoción de capacidad emprendedora, y por otro lado, el perfil de los ejecutores de dichas políticas. Estas dos causas van unidas, porque el enfoque de las políticas y el perfil de los ejecutores se potencian mutuamente en mundo de relaciones en que ocurren estos proyectos.

La debilidad del enfoque se encuentra en que posee un entendimiento insuficiente del fenómeno de la capacidad emprendedora centrado en ciertos aspectos ???externos??? de los rasgos de los emprendedores o de los recursos ???técnicos??? que requiere un emprendedor y no observa en profundidad los fenómenos humanos que operar en los casos que reconocemos la presencia de capacidad emprendedora. Esta insuficiencia no es técnica sino que es de fondo, porque estamos hablando de un paradigma que tiene cegueras que son claves en el entendimiento del fenómeno de la capacidad emprendedora.

En nuestra interpretación las debilidades del actual paradigma responden a un entendimiento errado de cómo los seres humanos actúan, piensan, aprenden y se relacionan. No siendo esta la oportunidad de desarrollar en profundidad este planteamiento, nos centraremos, por ahora, en los aspectos centrales del actual paradigma de la capacidad emprendedora:

Facultades Psicológicas: buscando ampliar y reproducir esta capacidad, los emprendedores denominados como empresarios, luego como innovadores, más tarde como creativos, han sido identificados principalmente por ciertos rasgos psicológicos como carácter, persistencia, inteligencia, liderazgo, orientación a resultados y capacidad de decisión. Gran parte de la literatura empresarial americana se centra en este aspecto de los emprendedores, consiguiendo al respecto innumerables best sellers pero no resultados destacables en nuevos emprendedores. En nuestra opinión estos rasgos sin bien pueden ser considerados como destrezas que posee un emprendedor, no definen el carácter ni la personalidad de una persona para siempre, y por el contrario, son parte del contexto cultural de las personas y están basadas sobre prácticas y observaciones que se pueden reproducir en la mayoría de las personas.

Facultades innatas: posiblemente apoyado por los débiles resultados en los intentos de reproducir estas misteriosas capacidades, existe la creencia que la capacidad emprendedora es una capacidad innata y selectiva, en la que sólo algunas personas nacerían con dicha virtud, donde en la perspectiva de desarrollar capacidad emprendedora se trataría de identificar a estas personas y proveerlos de recursos para que su herencia se expresara. En nuestra opinión, por el contrario, toda persona es emprendedora por el hecho de nacer con lenguaje, cuerpo e inserto en alguna tradición, lo que ocurre es que no todos tienen el espacio para de cultivar esta capacidad.

Facultades individuales: otro supuesto errado consiste en entender la capacidad emprendedora como una capacidad individual. La literatura americana, coherente con el estilo americano, se ha centrado en estudiar a los emprendedores como individuos con una diferencia especial que, basados en su determinación e inteligencia, son capaces de conseguir las metas que se auto imponen, salvando todo obstáculo por difícil que parezca. En nuestra interpretación, si bien existe una parte importante de determinación personal en los líderes, la capacidad emprendedora surge en ciertos espacios y comunidades, en las cuales algunas personas la encarnan con mayor fuerza pero su presencia depende principalmente del espacio de relaciones de cada comunidad.

Facultades ???intelectuales???: el contexto cultural en que ocurren los estudios y el diseño políticas relacionados al fenómeno emprendedor, han llevado a poner el acento en la dimensión intelectual de los emprendedores, donde lo que determina todo son la cantidad de inteligencia, conocimientos e información que es capaz de manejar el emprendedor. Este aspecto es crucial, porque muchas de las políticas de intervención social se basan en este supuesto, desde las políticas de educación regular hasta las políticas de prevención social, pasando por las de promoción de iniciativas. En este supuesto las personas actuarían o dejarían de actuar según cuenten o no con información. Para decirlo gráficamente, el consumo de drogas, las prácticas sexuales, los hábitos fiscales, las iniciativas empresariales y la creación de organizaciones, dependerían de la cantidad de información que tengan los ciudadanos. En nuestra opinión, la información y el conocimiento tradicionalmente entendido, incluyendo la capacidad de planificar y administrar, son una parte importante pero no determinante en la capacidad práctica de las personas.

Continuar la lectura: 2 y 3